09, noviembre, 2020.- La presidenta del PPCV, Isabel Bonig, ha pedido a Puig “un plan estratégico de la agricultura valenciana” y ha mostrado su rechazo a una PAC con menos fondos y más exigencias.

Bonig se ha reunido esta mañana con la portavoz de Agricultura del PP en el Congreso, Mila Marcos, y representantes de organizaciones agrarias como AVA. Luego han acudido a l’Alcúdia para visitar la cooperativa agrícola Nuestra Señora del Oreto.

“La Comunitat Valenciana debe elaborar un plan estratégico de la agricultura valenciana que trasladar al gobierno de España para que él se lo presente al gobierno de España”, ha señalado

Isabel Bonig ha indicado que “en ese plan debe estar la consideración del agua como pieza fundamental en el entablado de la agricultura, debe recogerse una posición clara de la situación de nuestra Comunitat en la España despoblada, fundamental para el crecimiento y generación de empleo y riqueza. Además, se debe reconocer al sector agrícola como uno de los pilares básicos de nuestra estructura económica. Además, hay que definir quienes son los beneficiarios de la PAC con derecho a recibir esas ayudas. Apoyamos la definición que ha dado el PP y esperamos que el gobierno de Sánchez sea receptivo y acepte esta consideración, porque si no nuestros agricultores, los agricultores de la zona mediterránea, tendrán serios problemas en el futuro”.

La líder popular ha solicitado a Puig que “presente proyectos concretos al gobierno de España en los proyectos de reconstrucción y hagan de la agricultura una pieza fundamental en la lucha contra el cambio climático ya que los cítricos son un sumidero de CO2 y hay que ponerlo en valor. Puig tiene que defender la agricultura valenciana ante el gobierno de España y esta ante Europa”.

Isabel Bonig ha manifestado que “el campo valenciano necesita seguridad y un campo normativo que tenga en cuenta sus especialidades”.

La presidenta popular ha lamentado que “en los presupuestos de la Generalitat para 2021 no se recoja un solo euro a nuevas infraestructuras e inversiones en la Vega Baja a las que se comprometió Puig por la DANA. Vamos a presentar enmiendas para revertir esto. Tampoco se han resuelto las ayudas para la regeneración de la costa mediterránea en la zona de Tavernes de la Valldigna o en la zona de Denia donde la inversión del gobierno de Sánchez es inexistente. El PP presentará enmiendas en el presupuesto de la Generalitat para que se dote de ayudas directas a los afectados en la zona de la Ribera por las lluvias de la semana pasada y pediremos las infraestructuras de canalización necesarias”.

Asimismo, la presidenta popular ha lamentado que tampoco se hayan pagado todavía los ocho millones de euros en ayudas por la helada del kaki de 2017. “Corren mucho a la hora de anunciar y difundir propaganda pero luego la falta de gestión hace que todos estos proyectos estén paralizados porque no llegan ayudas y no se ejecutan obras”.

No a una PAC con menos fondos

Por su parte, la portavoz de Agricultura del PP en el Congreso, Mila Marcos, ha compartido “la preocupación del sector agrario de la Comunitat Valenciana”. “Quieren seguir trabajando y compitiendo en los mercados y el PP los escucha. Hemos hablado de la PAC y el PP no comparte que haya una PAC con menos fondos y más exigencias para los ganaderos y agricultores españoles y valencianos”, ha explicado.

La diputada ha señalado que los agricultores y ganaderos “están planteando ser competitivos, estar en los mercados. El sector no quiere vivir de ayudas, quiere vivir de su trabajo, y esto es clave en el modelo de PAC que quiere el PP. Hay que controlar las fronteras y que todos los países jueguen con las mismas reglas. Las importaciones están aumentando incluso en productos en los que España es líder de producción”.

Marcos ha señalado que el Gobierno “hace hucha con el dinero del campo español”, y ha indicado que el Ministerio de Agricultura “ha perdido peso”. “Es el que menos recibe también de los fondos europeos para la reconstrucción”.

Por último, Marcos ha explicado que los impuestos que figuran en el PGE y afectan al sector agroalimentario “son más de lo que recibe. Hablamos de gasóleo, el impuesto de residuos, al comercio digital impactan directamente, y el que más impacta es el de las bebidas azucaras: 400 millones de euros que se quieren recuperar y que impactan directamente en los zumos, los lácteos, bebidas refrescantes y sector de remolacha”.