31, julio, 2021.- El PPCV ha presentado una propuesta en Les Corts para mantener la transferencia de agua del Embalse de Alarcón y ha pedido al gobierno valenciano que recurra esta decisión del ministro socialista Planas.

El portavoz de Agricultura del Grupo Popular en les Corts, Miguel Barrachina, ha señalado que “la propuesta socialista de dejar sin agua a los regantes de la provincia de Valencia a partir de 2022 es un ataque más contra nuestros agricultores”.

En la proposición no de ley registrada, se insta al Gobierno de la Nación a que “incluya en el Plan Hidrológico del Júcar la transferencia de agua desde el pantano de Alarcón hasta la Comunitat Valenciana y que mantenga los términos el Convenio de julio 2001 de usos del embalse de Alarcón, que asegura el agua de riego para la Comunitat Valenciana desde el referido pantano”.

Barrachina ha señalado que “también solicitamos que la consellera Mollá haga algo porque los agricultores valencianos tienen la impresión cierta de estar siendo perseguidos desde el gobierno de Sánchez sin que Puig haga nada para impedirlo. Todas las decisiones desde el gobierno central van en contra de nuestra agricultura. Los hechos así lo demuestran. La Comunitat Valenciana lidera el abandono nacional de tierras cultivadas, y ahora a los problemas de extensión de plagas sin control, de subida de costes energéticos y tributarios, se añade la reducción de las aportaciones de agua para nuestros regadíos”.

“Hasta 80.000 regantes, principalmente alicantinos, se verán afectados por el recorte ministerial de aportaciones del Acueducto Tajo-Segura, y ahora, la pretensión de dejar sin efecto el Convenio del Embalse de Alarcón de 2001, haría que 40.000 nuevas familias de la provincia de Valencia perdiesen el agua de un pantano construido con sus propios recursos”, ha añadido.

Para Miguel Barrachina, “es el propio gobierno de España quien ha impedido que sigamos con los tratamientos eficaces contra el cotonet y que se haya multiplicado el coste eléctrico y el del gasoil agrícola, además de la subida de impuestos. Todo esto está suponiendo la desaparición de miles de agricultores en la Comunitat Valenciana”.

“Parece que el gobierno de Pedro Sánchez se ha propuesto acabar con la agricultura valenciana al aprobar por un lado el recorte de agua en el Tajo y ahora las transferencias del embalse de Alarcón, construido en su día con el dinero de los recursos de los regantes de la provincia de Valencia. El daño ecológico que producen en cuanto a la mortandad de plantas y de cítricos es tremendo”.

Por último, Miguel Barrachina ha contrapuesto las decisiones del gobierno socialista con los anteriores gobiernos populares. “El recorte del pantano de Alarcón dejaría sin efecto el actual convenio firmado en 2001 y el del Tajo-Segura iría contra el memorándum pactado durante el gobierno de Rajoy, dejando sin efecto la propuesta de 2013. Las sectarias decisiones socialistas anulan buenas decisiones de gobiernos populares en favor de nuestros agricultores”.