El PPCV logra la unanimidad de los grupos de Les Corts para la continuidad del trasvase Tajo-Segura

·      Císcar: “Hay una voluntad clarísima por parte del Gobierno de Sánchez de acabar con el trasvase”

·      Del trasvase dependen 100.000 puestos de trabajo y se riegan 44 millones de árboles. “La desaparición del trasvase podría implicar la desertificación de muchos terrenos”

 

30, marzo, 2021.- El Grupo Parlamentario Popular en Les Corts ha logrado hoy la unanimidad de todos los grupos a la iniciativa sobre el mantenimiento del trasvase Tajo-Segura tras un acuerdo transaccional.

   El portavoz de Agua, José Císcar, ha afirmado que hay “una voluntad clarísima por parte del Gobierno de Pedro Sánchez de acabar con el trasvase Tajo-Segura”, y ha recordado que desde el PPCV se ha advertido en diferentes ocasiones “de la hoja de ruta clara del Ministerio de Transición Ecológica para modificar las reglas de explotación del trasvase, quitando caudales trasvasables y en una segunda fase aumentando los caudales ecológicos del Tajo para que haya menos agua para trasvasar”.

   La iniciativa del GPP pide al Consell que inste al Gobierno de España a que no se modifiquen las reglas de explotación “mientras no haya un consenso con los regantes y mientras no se apruebe el nuevo plan hidrológico del Tajo, porque sin actualizar la información hidrológica es muy difícil cambiar una reglas de explotación”, ha manifestado.

   Císcar ha recordado que del trasvase dependen 100.000 puestos de trabajo y se riegan 44 millones de árboles “que tienen el efecto de sumidero de CO2 y por tanto luchan contra el cambio climático”. Así, el diputado ha afirmado que la desaparición de este trasvase “podría implicar la desertificación de muchos terrenos”.

   El portavoz de Agua ha señalado que la modificación de las reglas de explotación que quiere sacar adelante Sánchez, “se caracteriza por ser inoportuna, porque se pretende aprobar sin la existencia de un nuevo Plan del Tajo que actualice los requerimientos hidrológicos y ambientales de la cabecera del Tajo, infringe abiertamente la Ley que aprobó los acuerdos contenidos el Memorándum (Ley 21/2015), rompiendo la proporción entre agua destinada a abastecimiento y agua destinada a regadíos; y quiere romper el consenso alcanzado en su día para la aprobación de esas reglas de explotación en el seno del Memorándum”.